sábado, 30 de octubre de 2010

Juegos con fuego




Juegos con fuego

Los juegos con fuego siempre han llamado al atención de curiosos porque tiene que ver con lo exótico y peligroso, el tema erótico no escapa de ello. Es recomendable ser practicado sólo por expertos


Una imagen de la revista Soho en la portada con la actriz María Fernanda Yepes, experta en juegos con fuego.

domingo, 10 de octubre de 2010

Estimuladores DUREX

http://www.durex.com/es-ES/Products/Vibrators/pages/VibratorsHomepage.aspx


El gigante de los preservativos a nivel mundial nos presenta una amplia gama de vibradores, estimuladores y lubricantes de amplia calidad para aumentar el placer en pareja, de manera individual o colectiva, búscalos y no te arrepentirás, algunos son reusables otros son desechables.




Ultra es el último anillo vibrador en incorporarse a la familia play vibrations de Durex, como su nombre indica va aún más allá de su predecesor convirtiendo tu pene en un en un vibrador rabbit o conejito rampante.
Este aro vibrador con forma de abrebotellas es totalmente flexible e inofensivo, simplemente te lo tienes que colocar en la base del pene y darle al botón morado de encendido, enseguida se pondrá en marcha para ofrecer hasta cuarenta minutos de placer. Así lo tengas más o menos grueso no hay problema ya que el aro al ser flexible se ajusta perfectamente.


Y si los 40 minutos de batería te saben a poco, te cuento que viene con lubricante y baterías extra para que no decaiga la fiesta!. Incluso si quieres te lo puedes llevar puesto a la ducha ya que es resistente al agua.


Con éste ya son dos los anillos vibradores que la marca Durex ha puesto en el mercado: play vibrations y play vibrations ultra. Estos días de hecho están haciendo una campaña aún más intensa en televisión para dar a conocer un producto cada vez más popular por lo económico y sencillo que resulta usarlo. ¿te animas a probarlo?




jueves, 26 de agosto de 2010

Cuando el pene es lo que sobra

Cuando el pene es lo que sobra







SEXO SIN TABÚ Los colectivos GLBT y los grupos S han logrado que las lesbianas dejen de ser vistas como "brujas". Las homosexuales esperan el reconocimiento constitucional


25 de agosto 2010
12:21 pm - Elizabeth Araujo




Silvia y Matty no pueden ser más felices. Estrujan a plenitud sus treintitantos años y aprovechan que son profesionales, sin prejuicios, para dormir en la misma cama y despertar con una sonrisa. Conscientes de ello, poco les importa si al entrar a una fiesta, las miradas furtivas les atraviesan cuando notan que llegan tomadas de la mano.


"No sabes cuánto nos costó llegar aquí", dice Silvia C., analista de cuentas de una institución bancaria, y cuya belleza, según la tradición, pudo haberle reservado un novio guapo con un plan de matrimonio.


Ambas chicas ¬una de Valencia, la otra caraqueña¬ llevan tres años en una relación que han nutrido con coraje para espantar los fantasmas del machismo, empezando por el rostro de asombro de los padres, cuando les dijeron que ellas se amaban. "Para mí fue duro. Mi papá, un militar retirado que me acosaba preguntándome cuándo me iba a casar, se quedó perplejo la Nochebuena en que me aparecí con Matty y les dije: `Familia, les presento a mi novia".


Mujer contra mujer. Las lesbianas son mujeres que aman a otras mujeres. Mujer que se siente atraída sexualmente por la amiga o desconocida, y quizás más vinculada emocional y espiritualmente. Lo demás transcurre, como reza la canción de Mecano, "a solas sin nada que perder, tras las manos va el resto de la piel". Pero tal preferencia no se estaciona en el sexo: llevan una vida similar a la pareja heterosexual.


Aunque habrá quien pregunte: ¿Qué les pasó? ¿Los desengaños con los hombres les hicieron cambiar de acera? "El lesbianismo es homosexualidad en la mujer y no entra en clasificación como enfermedad. Simplemente, se le considera un patrón sexual como la bisexualidad", explica Luz Jaimes, médica y presidenta de la Sociedad Venezolana de Sexología Médica.


La especialista admite que no hay respuesta precisa, cuando el tema se atora en las preguntas. "Hasta ahora se ignoran los orígenes de la homosexualidad, aunque hay teorías biológicas, genéticas culturales y de aprendizaje".

Señala que en su historia sexual el individuo puede haber tenido experiencias heterosexuales y bisexuales. "Esto se evalúa con la escala de Kinsey, que es una medición de valoración del 1 al 6, y que indica el grado de acercamiento a hetero o a homosexualidad.
De hecho hay homosexuales que tienen o han tenido contactos heterosexuales".


Jaimes insiste en la definición sexológica porque se tiende a etiquetar el lesbianismo. "No figuran en manuales de clasificación de disfunciones sexuales; pero antes sí estaba en los manuales de psiquiatría".


Chicas invisibles. A la pregunta ¿por qué ahora es más frecuente?, responde: por la influencia sociocultural y el desarrollo de los medios, que han logrado romper el ostracismo de la práctica homosexual.


Jaimes cita comunidades en islas del Pacífico que educan a ciertos niños en el papel de mujer, con el interés de tener alguien con fuerza varonil en casa para tareas domésticas.


Se trata de una excepción: nadie nace o se hace homosexual. Es lo que sostienen las ocho organizaciones o colectivos GLBT (gay, lesbianas, bisexuales y transgéneros) venezolanos, que esperan se reconozcan sus orientaciones sexuales con la modificación de la Constitución, para casarse y adoptar niños. Pero el proyecto duerme en la Asamblea Nacional.

José Ramón Merentes, de Unión Afirmativa, asociación que integra el denominado Grupo S (agrupaciones sexuales), aspira a que con el matrimonio homosexual se abran otras puertas, como la adopción de niños, acceder a propiedades, seguridad social mancomunada e iguales prerrogativas que la pareja heterosexual. Se calcula que 10% de la población venezolana es homosexual y 15% es bisexual.


"Queremos dejar de ser invisibles, que la sociedad y las leyes vayan juntas, poner fin a los prejuicios y que no nos quemen en las hogueras mentales que se escandalizan si dos chicas se besan", expresa Carmen Granados, autora de una demanda contra el Metro porque dos funcionarios la amonestaron a ella y su novia cuando se besaban, y no hicieron lo propio con una pareja heterosexual.


Otro falso mito que ronda sobre la imagen del lesbianismo es que una de la pareja ejecuta el papel de hombre. "Es mentira, Julia y yo disfrutamos del sexo como mujeres, sin ayuda de un macho ni nada que se parezca", dice Carmen, con el mismo ímpetu con el que una tarde en la plaza Altamira, cuando ella y Julia se besaban, dos tipos en un auto les gritaron: "Chamas, a ustedes les hace falta un pene"; y Carmen, muy aplomada, se volteó y les dijo: "No, aquí el pene es lo que sobra".






http://www.el-nacional.com/www/site/p_contenido.php?q=nodo%2F151154%2FSalud%2FCuando-el-pene-es-lo-que-sobra

 


jueves, 27 de mayo de 2010

Fellatio



La Felación (del latín fellatio) felatorio o coito per os (por boca) es una práctica de sexo oral que consiste en chupar y lamer el pene con la boca, con la lengua y con los labios.

Al utilizar un área tan sensible como la boca, utilizando la lengua de manera creativa y apretando de manera que los labios hagan o realicen cierto vaivén se puede darle a la felación una dimensión  distinta, se puede realizar la felación de diversas maneras conocidas como:  

Francés bebido: Tragar el semen al finalizar la felación.
Francés profundo: Meterse el pene en su totalidad en la boca.
Francés natural o francés sin: Realizar una felación sin preservativo.

Una variante del francés bebido consiste en apenas recibir el semen en la boca, acercar las bocas para iniciar un clásico beso francés en el cual se intercambiará el semen aún caliente al contacto de las caricias entre las lenguas, originando el conocido BESO BLANCO, del cual ya habíamos escrito en otros post.

La fellatio puede dar origen a ciertas caricias luego de la eyaculación en la cual se puede aprovechar el semen para lubricar  el pene mientras se aplica una masturbación y se relubrica el pene con el semen, hasta lograr que las pupilas del hombre se dilaten por completo mientras se ocasionan sensaciones  descomunales hasta el punto de lograr otra eyaculación, es una experiencia muy fuerte pero inolvidable, personalmente es una de las cosas más placenteras que he vivido.

Por otra  parte el semen de la fellatio puede ser compartido para humedecer los pechos de la pareja, mientras se revuelcan los involucrados y se brindan caricias y besos, pero en verdad no hay recetas definidas, mientras la pareja considere el hecho de disfrutar y compartir.